HARTFORD.- Los demócratas y los líderes de la atención médica advirtieron sobre las consecuencias devastadoras para casi un millón de las personas más vulnerables de Connecticut, si los recortes propuestos a Medicaid se convierten en ley.
Durante una reunión en el edificio de la Oficinas Legislativas, el senador Matt Lesser, demócrata de Middletown, y la representante Jillian Gilchrest, demócrata de West Hartford, dijeron que las reducciones propuestas en la financiación federal de Medicaid afectarían gravemente a las comunidades vulnerables, incluidas las mujeres embarazadas, los niños, los ancianos, las personas con discapacidades y las personas que requieren servicios de salud mental.
“En el estado de Connecticut, casi un millón de personas reciben atención médica a través de nuestro programa Medicaid. Estamos hablando de servicios para personas con autismo, de la atención en los hogares de ancianos, de los servicios para las personas con problemas de salud mental y de aquellos que padecen discapacidades del desarrollo intelectual”, expresó Gilchrest.
Los recortes federales propuestos obligarían a los estados a compensar la diferencia mediante un aumento de impuestos o reducir los servicios disponibles para los beneficiarios de Medicaid.
“Medicaid es una asociación entre los estados y el gobierno federal. Si el gobierno federal se niega a pagar su parte, estados como Connecticut tendrían que tomar decisiones presupuestarias imposibles. No se trata sólo de estados azules o rojos. Es una crisis nacional”, expresó Lesser.
Según los demócratas del Senado, si los recortes se centran en revertir la expansión de Medicaid bajo la Affordable Care Act (ACA), el estado tendría que aumentar su gasto en un 23.5% (o 850 millones de dólares) para compensar la diferencia.
Los profesionales de la salud que asistieron al evento se hicieron eco de las preocupaciones sobre el posible impacto en los proveedores médicos y los pacientes.
El doctor Josh Jones, médico de atención primaria en Hartford, habló sobre los efectos reales de los recortes de Medicaid en sus pacientes.
“No se trata sólo de números. Se trata de personas que veo todos los días. Amigos, vecinos y miembros de la comunidad. Si no pueden pagar sus medicamentos para enfermedades crónicas como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (COPD) o la diabetes, su salud y sus vidas están en riesgo”, dijo Jones.
Jones también señaló las implicaciones para el tratamiento de las adicciones y la atención de afirmación de género, y expresó su preocupación por el hecho de que muchos de sus pacientes se quedarían sin acceso a los servicios médicos necesarios.
Sabrina Trocchi, presidenta y directora ejecutiva de Wheeler Health, enfatizó el efecto dominó que estos recortes tendrían en los sistemas de atención médica en todo el estado.
“Atendemos a más de 440 mil pacientes, de los cuales más del 60%, o aproximadamente 260 mil, son pacientes de Medicaid. Si estos recortes se llevan a cabo, veremos efectos devastadores en todo nuestro sistema de atención médica, desde hospitales hasta servicios de salud mental y atención de afirmación de género”, dijo Trocchi.
Trocchi también dijo que los trabajadores de la salud ya están viendo miedo e incertidumbre de los pacientes que dependen de Medicaid para servicios esenciales.
Más allá de la atención al paciente, los oradores también advirtieron sobre el impacto económico de los recortes propuestos a Medicaid. La industria de la atención médica es uno de los empleadores más grandes en muchas comunidades de Connecticut, y la reducción de la financiación de Medicaid podría llevar al cierre de hospitales, la pérdida de puestos de trabajo y la disminución del acceso a los servicios médicos, particularmente en áreas rurales y desatendidas.
Los legisladores pidieron al público que tome medidas comunicándose con sus representantes y abogando contra las reducciones propuestas a Medicaid.