WHITE PLAINS.- El ejecutivo del condado de Westchester, Ken Jenkins, instó a los congresistas federales George Latimer y Mike Lawler a oponerse al proyecto de ley de reconciliación presupuestaria federal, llamado H.R. 1, tras su reciente aprobación en el Senado de los Estados Unidos.
El proyecto de ley, que amplía disposiciones ya perjudiciales aprobadas por la Cámara de Representantes, recortaría drásticamente los fondos de Medicaid y el Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP), con consecuencias catastróficas para los residentes del condado de Westchester.
Jenkins escribió en su carta que “en resumen, la H.R. 1 ya era mala. Pero los cambios del Senado reducirán la cobertura del seguro para más personas. Sacudirán los hospitales y aumentarán los costos y obligarán a los contribuyentes a pagar más por menos. Obligarán a nuestros veteranos, niños y ancianos a pasar hambre, mientras miles ya hacen fila para alimentar a sus familias”.
Como se detalla en la carta:
– Más de 240,000 personas de Westchester dependen actualmente de Medicaid. La versión aprobada por la Cámara de Representantes ya recortó drásticamente la cobertura para más de 13,000 personas en los distritos congresionales 16 y 17 de Nueva York.
– Las enmiendas del Senado agravarían la situación al imponer requisitos laborales más estrictos y restringir la elegibilidad.
– El condado de Westchester podría enfrentar un déficit anual de 23 millones de dólares si se le exige asumir los costos adicionales de Medicaid transferidos del gobierno federal.
– Los hospitales y centros médicos de los distritos 16 y 17 de Nueva York perderían más de 62 millones de dólares anuales, lo que podría resultar en cierres y una reducción del acceso a la atención médica para todas las personas.
– Los recortes al SNAP privarían de asistencia alimentaria a miles de personas de Westchester, incluyendo veteranos, ancianos y padres que trabajan. Los padres o abuelos que cuidan a niños mayores de 13 años también podrían perder la elegibilidad.
Jenkins escribió que “la tasa de desempleo de Westchester es del 3.4%, muy por debajo del promedio nacional. Con el 23.9% de la población de Westchester recibiendo Medicaid, es evidente que muchos estadounidenses trabajadores dependen de este programa, y que muchos de ellos, que ya luchan contra los aumentos de precios provocados por los aranceles, perderán su cobertura si se permite que estos recortes sigan adelante”.
Jenkins prometió el pleno apoyo de Westchester a ambos legisladores en cualquier intento de detener la aprobación de la legislación.
Apuntó que “la vida de miles de nuestros residentes, y la de sus electores, está en juego”.
