NEW HAVEN.- Hace poco más de un año, la National Suicide Prevention Lifeline adoptó el número más corto: 988.
Desde entonces, los defensores de la salud mental en Connecticut y en todo los Estados Unidos manifestaron que están obteniendo excelentes resultados.
United Way of Connecticut informó un aumento del 125% en las llamadas desde que se estableció el nuevo número.
Lisa Tepper-Bates, presidenta y directora ejecutiva de United Way of Connecticut, dijo que, aunque el Estado mantuvo la línea durante varios años por debajo del número anterior, no esperaban un aumento tan pronunciado cuando el número cambió.
“Diría que eso nos sorprendió, pero también me enorgullece decir que no solo lo logramos, sino que nuestro equipo siempre ha tenido un desempeño superior en la nación al asegurarnos de atender cada llamada rápidamente”, reconoció Tepper-Bates.
La Substance Abuse and Mental Health Services Administration informó que Connecticut tiene una tasa de respuesta de alrededor del 90% para todas las llamadas.
En el futuro, espera encontrar maneras de hacer que el 988 en Connecticut funcione mejor con otros servicios de salud mental, particularmente aquellos que se enfocan en la salud mental de los jóvenes en el Estado.
Cualquier persona que sufra pensamientos suicidas debe comunicarse con el 988 o buscar opciones de tratamiento de salud mental.
Recientemente, el Estado abrió varios Centros de Crisis Urgente para que los jóvenes los visiten, en lugar de ir a la sala de emergencias.
Stephanie Bozak, gerente clínica de salud conductual en la Unidad de Salud Mental Infantil del Departamento de Niños y Familias de Connecticut, describió cómo funcionan los nuevos centros en conjunto con la línea 988.
“Queríamos un lugar donde llamar si las familias buscaban ayuda y el 988 se conecta con nuestra unidad móvil de crisis en Connecticut”, explicó Bozak. “Tenemos una unidad de crisis móvil que atiende a los jóvenes que puede ir a las familias y trabajar con ellas”, agregó la gerente.
Los problemas de salud mental de los jóvenes se han visto exacerbados por la pandemia de COVID-19 en Connecticut y la nación.
El Mental Health America’s State of Mental Health Report encontró que alrededor del 16% de los jóvenes en el Estado han tenido al menos un episodio depresivo mayor, un ligero aumento desde 2022.
Ann Irr Dagle, presidenta de la Junta Asesora sobre Suicidios de Connecticut, dijo que el cambio de número de teléfono ha marcado una gran diferencia para ayudar a las personas. Pero advirtió que otros estados necesitan fondos adicionales para tener una ramificación de atención continua desde 988.
“Es genial tener el número, pero se necesita atención continua, ya que no solo se necesita el personal capacitado para responder las llamadas, se necesita que los socorristas salgan y respondan, y luego se necesita el tratamiento. Entonces, ese dinero debe destinarse a todo lo anterior”, sostuvo Irr Dagle.
La Kaiser Family Foundation descubrió que, si bien los dólares federales respaldan la línea 988 a nivel nacional, los estados son responsables de pagar la factura de los centros de llamadas de crisis. Por lo general, han recibido fondos federales mínimos, entre 2 mil 500 y 5 mil dólares al año.