STAMFORD.- Las hospitalizaciones por casos de COVID-19 en los Estados Unidos aumentaron un 12.1 % en la semana que concluyó el 22 de julio en comparación con la anterior, indican los datos más recientes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
En la semana hasta el 22 de julio hubo 8 mil 35 casos de COVID-19 que requirieron hospitalización, en comparación con los 7 mil 168 de la semana previa.
Los aumentos no son parejos en todo el país y son más notables en el sureste.
Las hospitalizaciones por la enfermedad, que en 2020 se propagó en una pandemia que paralizó al país, han estado aumentando en semanas recientes por primera vez en lo que va del año.
En la anterior oleada de casos de la enfermedad hace un año, las hospitalizaciones alcanzaron la cifra de 15 mil por semana.
Pero la Casa Blanca sostuvo que el aumento actual no es inusual y que las autoridades sanitarias están vigilando estrechamente la situación.
Pese al aumento en las hospitalizaciones, el gobierno federal emitió un mensaje esta semana llamar a la calma.
“La Administración ha logrado progresos históricos en cuanto a la capacidad de nuestra nación para enfrentar el COVID-19 de tal forma que la enfermedad ya no trastorna significativamente la forma en que vivimos nuestras vidas”, señaló la portavoz de la Casa Blanca, Kelly Scully.
Por su parte, Brett Giroir, quien dirigió la campaña de pruebas de COVID-19 en el Gobierno del ahora ex presidente Donald Trump (2017-2021), dijo a medios que el incremento en los casos de COVID-19 no debería considerarse como un acontecimiento mayor.
Los datos de los Centros para el Control y Prevención de las enfermedades (CDC) también muestran que la tasa de mortalidad por complicaciones del COVID-19 se ha mantenido sin mayores cambios en 0.9 % desde inicios de 2023.
Desde la eclosión de la pandemia a comienzos de 2020 se han registrado en los Estados Unidos 6 millones 224 mil 831 hospitalizaciones por COVID-19, y por esa enfermedad han muerto un millón 135 mil 919 personas.
Las autoridades sanitarias sostienen que las personas en riesgo más alto por el COVID-19 son las de mayor edad y las que tienen condiciones de salud subyacentes, y recomiendan la actualización de las vacunas.
¿Por qué hay un aumento en los casos de COVID-19?
Las razones de este aumento de casos estarían basadas en el cambio de comportamiento de las personas, que durante las vacaciones suelen reunirse en grupos más grandes en lugares cerrados mientras hace mucho calor, según explicó a CNN, Leana Wen, profesora de política y gestión de la salud en la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad, George Washington.
Wen coincidió en que es “poco probable” que las personas que ahora mismo están sanas, o que hayan tenido COVID-19 en el pasado, puedan desarrollar síntomas graves en caso de reinfectarse con esta nueva ola.
Sin embargo, alertó de que personas mayores, pacientes con problemas crónicos de pulmón, riñón y corazón se “deberían considerar tomar precauciones adicionales” y estar al día con sus vacunas de refuerzo.
“Estamos bastante bien en términos de inmunidad. La población en general parece estar en una situación bastante buena”, explicó la doctora Céline Gounder, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad de Nueva York, en un artículo publicado en KFF Health News.
¿Cómo protegerse ante el rebrote de COVID-19?
El uso de barbijos (cubrebocas) no sería parte de una política pública generalizada en el corto plazo, según las consideraciones de Wen, pero ella misma resaltó que tiene un impacto positivo para las personas que la utilizan.
“Alguien que quiera protegerse puede hacerlo usando una mascarilla de alta calidad, incluso si otras personas a su alrededor no están usando una”, indicó la experta.
Los expertos no recomiendan que las personas necesariamente cambien por completo sus planes de vacaciones de verano con los nuevos datos sobre la enfermedad, pero sí piden tomar las medidas para evitar riesgos.
“Si va a estar en un espacio lleno de gente, debería considerar utilizar una mascarilla más protectora, como una KN95 o N95. Si sabe que está infectado, debe quedarse en casa y mantenerse alejado de otras personas. Eso no ha cambiado”, explicó a NBC News, el doctor Bernard Camins, director médico para la prevención de infecciones en el Sistema de Salud Mount Sinai en la ciudad de Nueva York.
El pronóstico de una nueva oleada de la enfermedad durante la segunda mitad de 2023 podría motivar que entre septiembre y octubre la U.S. Food and Drug Administration (FDA) apruebe una nueva vacuna para reforzar la inmunidad, por lo que los científicos instan a la población a aplicarse los refuerzos tan pronto como les sea posible.
Vacunas se actualizarán ante avance global de subvariante XBB.1
De acuerdo con un informe, si bien ya no rige la declaración de emergencia sanitaria global, el coronavirus aún sigue circulando y causando la muerte en poblaciones vulnerables.
De hecho, en el último mes 3 mil 700 personas perdieron la vida en el mundo por el SARS-CoV-2, el virus que causa la infección del COVID-19.
Las fórmulas actuales de las vacunas brindan protección contra la enfermedad grave y la hospitalización, sin embargo, el virus sigue evolucionando y emergen diferentes sublinajes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que ahora está vigilando principalmente a dos sublinajes de Ómicron que resultan de interés. Son los sublinajes XBB.1.5 y XBB.1.16.
En muchos países se siguen aplicando las vacunas bivalentes como refuerzos, que dan alta protección contra la cepa original del virus (conocida como la ancestral de Wuhan, China) junto con los linajes de Ómicron BA.4 y BA.5.
Sin embargo, a partir de los cambios por la evolución del virus, los expertos en virología e infectología, junto a los grandes referentes de la industria farmacéutica, empezaron a evaluar si las vacunas debían ser actualizadas para la próxima temporada de vacunación.
En los Estados Unidos ya se decidió el cambio. Un grupo de asesores independientes de la FDA votó recientemente a favor de recomendar que se actualicen las vacunas para la temporada de vacunación 2023-2024 que se iniciará en el otoño boreal. Y las farmacéuticas han presentado a fin de junio la evidencia científica y solicitaron la aprobación de la agencia reguladora de los Estados Unidos.
En ese marco, se espera que, en septiembre, una vez que se efectivice la autorización de la FDA y la recomendación de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, los fabricantes de vacunas Pfizer, Moderna y Novavax (las tres empresas que suministran las dosis contra el COVID-19 en los Estados Unidos) presenten las nuevas dosis de vacunas contra la subvariante XBB.1.5 para la población estadounidense. (Servicios combinados).