BRIDGEPORT.- Después de que los legisladores de Connecticut aprobaran un presupuesto de 51 mil millones de dólares esta semana, los cuidadores de personas con discapacidades del desarrollo y adultos mayores continuaron presionando por mejores salarios.
Los legisladores aprobaron alrededor de 125 millones de dólares en fondos estatales para programas diurnos y de hogar de Medicaid. Los cuidadores esperaban 200 millones de dólares.
“Los cuidadores merecen más”, dijo Rob Baril, presidente de SEIU 1199 New England.
“La financiación adicional de Medicaid de 125 millones a 150 millones de dólares para este sector de trabajadores es un comienzo, pero está muy por debajo de lo que necesitan los cuidadores”, dijo Baril.
“Con más de una década de presupuestos de austeridad, los servicios de Medicaid para personas con discapacidades recibieron fondos insuficientes por cientos de millones de dólares desde 2008. Esta es una clara ilustración de que el presupuesto estatal está aplastando a los trabajadores financiados con fondos públicos”, agregó el sindicalista.
La aprobación del presupuesto se produce cuando los cuidadores han estado en huelga en las últimas semanas.
SEIU 1199 New England quiere crear un camino hacia un salario mínimo de 25 dólares por hora.
Pedro Zayas está con SEIU 1199 New England y dijo que llevar el debate del presupuesto hasta el final de la sesión terminó privando a los trabajadores esenciales de color, que constituyen muchos de los miembros del sindicato. Los líderes sindicales dicen que muchos de sus miembros son de Puerto Rico, Jamaica y Haití.
“Entonces, sin duda, hay mucho sobre la discriminación basada en la discriminación de género, basada en la raza. Y la única razón por la que sentimos que los trabajadores no reciben el respeto que merecen es por su demografía”, precisó Zayas.
Janet Johnson ha sido trabajadora de hogares grupales durante 38 años. Johnson dijo que el presupuesto aprobado por los legisladores refleja una cultura más amplia que subestima su trabajo.
“En este campo, hay muchas mujeres, principalmente mujeres de color, que definitivamente están mal pagadas, no son apreciadas e ignoradas, como si fuéramos invisibles”, precisó Johnson.
Angie Cooper de Bridgeport ha estado trabajando en el campo durante 23 años. Ella dijo que Connecticut todavía tiene un largo camino por recorrer para terminar con la discriminación, particularmente para las mujeres de color, como ella, que constituyen tantos trabajadores esenciales.
Zayas dijo que los cuidadores cotidianos están expuestos a graves problemas de comportamiento y enfermedades infecciosas de sus clientes, pero aun así hacen el trabajo porque les importa.
Janet Philips-Smith, trabajadora de un hogar grupal durante 23 años, está de acuerdo.
“Muchas mujeres pertenecientes a las minorías y mujeres, en general, sienten pasión por cuidar. Es por eso que probablemente muchas de nosotras estamos apoyando este proyecto de ley, porque somos seres humanos, y hacemos un buen trabajo en eso”, declaró Phillips-Smith.
Por su parte, el gobernador Ned Lamont, demócrata, elogió el acuerdo presupuestario alcanzado con los legisladores estatales.
