NUEVA YORK.- Los hospitales que no brinden atención médica que reafirme el género debido a una orden ejecutiva de la Casa Blanca para poner fin a la práctica podrían violar la ley estatal, advirtió la fiscal general de Nueva York, Letitia James, poniendo a las instituciones de salud en medio de un creciente conflicto entre la administración del presidente Donald Trump y las autoridades estatales.
La carta emitida, el lunes pasado, por James llega después de que NYU Langone Health cancelara las citas para la atención médica que “afirma el género” a dos menores durante el fin de semana y el hospital más grande de Nueva York, el New York-Presbyterian Hospital, eliminara el lenguaje sobre los procedimientos médicos de su sitio web.
“Afirmar el género” se refiere al proceso por el cual una persona transgénero o no binaria afirma y reconoce su identidad de género, que puede ser diferente de la asignada al nacer.
La semana pasada, el presidente Donald Trump emitió una orden ejecutiva que establece que los hospitales podrían perder fondos federales si continúan administrando tratamiento para personas trans y otras menores de 19 años. Esa línea de tratamiento incluye bloqueadores de la pubertad y tratamientos hormonales.
Pero James escribió que negar servicios de salud califica como discriminación.
“Optar por negar servicios a una clase de personas en función de su estatus protegido, como negar la disponibilidad de servicios a personas transgénero en función de su identidad de género o su diagnóstico de disforia de género, mientras que se ofrecen dichos servicios a personas cisgénero, es discriminación según la ley de Nueva York”, escribió James en la carta.
La orden de Trump describió la atención de afirmación de género como “mutilación química y quirúrgica de niños”.
“Es política de los Estados Unidos no financiar, patrocinar, promover, ayudar o apoyar la llamada ‘transición’ de un niño de un sexo a otro”, se puede leer en la orden.
