NORWALK.- Más de 100 mil adultos mayores asegurados por Medicare en Connecticut podrían ver ahorros de hasta casi el 80 por ciento en medicamentos populares seleccionados.
Eso es según las negociaciones de precios de Medicare anunciadas por la Casa Blanca esta semana.
La administración Biden, en virtud de la Inflation Reduction Act, negoció con las compañías farmacéuticas el precio de los 10 medicamentos más caros y comúnmente recetados a los beneficiarios de Medicare.
Más de 120 mil residentes de Connecticut toman esos medicamentos, de acuerdo con Nora Duncan, directora estatal de AARP Connecticut.
“Para estas personas de las que hemos estado escuchando, puede significar la diferencia entre no tener que elegir entre cortar una pastilla por la mitad o no comer”, expresó Duncan.
El Representante federal de Connecticut, Joe Courtney, que representa al este de Connecticut, votó a favor de la Inflation Reduction Act. Está mirando el panorama general.
“Esto es un gran cambio para los pacientes, pero también para la solvencia futura del sistema Medicare”, dijo el legislador.
Los precios más bajos entrarán en vigencia en 2026. Se espera que Medicare ahorre casi 6 mil millones de dólares en el primer año.
“Creo que estas 122 mil personas en Connecticut estarán muy felices cuando llegue 2026 y vean ahorros de entre el 38% y el 79% en estos medicamentos críticos”, declaró Duncan.
La lista de medicamentos (Eliquis, Jardiance, Xarelto, Januvia, Farxiga, Entresto, Enbrel, Imbruvica, Stelara y Fiasp) abarca desde el tratamiento de la artritis y la diabetes hasta el cáncer, las enfermedades cardiovasculares y las enfermedades renales.
Pero la nueva ley, que creó los costos más bajos a través de negociaciones de precios, no se extiende a todos los estadounidenses.
“Y ese es el siguiente paso que debe darse si realmente vamos a tener un sistema de atención médica justo”, dijo Courtney.
La legislación que se encuentra actualmente en la Cámara de Representantes, denominada Lowering Health Care Cost for American Families Act, tiene como propósito extender estos precios más bajos a los planes de seguro médico ofrecidos por los empleadores.
“Sería opcional, pero volvería a brindarles a las personas la oportunidad de obtener esos costos más bajos”, finalizó Courtney.
