WASHINGTON DC.- Casi 21 millones de niños de bajos ingresos tendrán acceso garantizado a alimentos este verano, gracias a un nuevo programa federal que tiene como objetivo reducir el hambre infantil en la temporada de vacaciones.
El programa de Transferencia Electrónica de Beneficios de Verano, conocido como Summer EBT, proporcionará a las familias elegibles 120 dólares por niño durante el verano para comprar alimentos en supermercados, mercados de agricultores y otros negocios minoristas autorizados.
Este programa comenzó como un proyecto piloto en 2011, pero el Congreso lo hizo permanente para el año Fiscal 2023.
En total, se espera que se distribuyan casi 2 mil millones y medio de dólares en beneficios para alimentos.
Unos 35 estados ya han confirmado su participación en el programa, cubriendo aproximadamente al 70 por ciento de los niños elegibles.
Se espera que otros estados se inscriban para el próximo verano.
