WESTPORT.- Un panel legislativo de Connecticut sobre la salud pública impulsó, el miércoles pasado, un plan para prohibir la venta de productos de vapeo con sabor en un esfuerzo por reducir el uso de nicotina por parte de los menores.
El concepto, que los legisladores han debatido durante los últimos dos años sin ser aprobado, prohibiría la venta de cualquier sabor de vapeo aparte del tabaco y aumentaría las sanciones para las tiendas que vendan productos de nicotina a los jóvenes.
El representante Jonathan Steinberg, un demócrata de Westport que copreside el Comité de Salud Pública, manifestó que la legislación abordaría el tema “espinoso” de los productos de vapeo con sabor, que la legislatura dejó de lado en 2019 cuando elevó la edad requerida para comprar productos de tabaco de 18 a 21.
“Para ser claros, estamos abordando directamente el tema de los sabores. Estamos aumentando las penas para aquellos que no se portan bien”, indicó Steinberg, partidario del proyecto de ley desde hace mucho tiempo.
Pero la prohibición ha sido difícil de vender entre algunos en la legislatura y la votación del miércoles pasado, de 19 a 12, encontró a los miembros del comité divididos sobre el tema.
Varios legisladores expresaron su preocupación de que prohibir los productos de vapeo con sabor podría tener la consecuencia no deseada de llevar a los consumidores de nicotina a productos combustibles más dañinos como los cigarrillos.
La representante Jamie Foster, demócrata de Ellington, señaló el testimonio de una profesora de la Universidad de Yale, la doctora Abigail Friedman, que sugiere que la política podría aumentar el consumo de tabaco entre los menores y reducir el abandono del hábito de fumar entre los adultos.
“Sería más fácil y significativamente más cómodo para mí alinearme con los defensores que quieren que los niños no tengan acceso al tabaco. Sería más fácil si pudiéramos decir simplemente ‘los cigarrillos electrónicos son malos’ y prohibirlos, desearía que la ciencia respaldara eso, pero no es así”, precisó Foster.
Varios republicanos también expresaron su oposición al proyecto de ley, incluida la representante Christie Carpino, republicana de Cromwell, quien dijo que deseaba que el panel hubiera optado por cambiar el proyecto de ley para acomodar las preocupaciones planteadas durante la audiencia pública.
Steinberg insistió en que tenía la intención de promover la política sin cambios sustanciales.
“Estamos abiertos a las conversaciones, pero como dije, nuestra intención es prohibir los sabores de vapeo”, finalizó Steinberg.
