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Friday, February 7, 2025

Agencias de reasentamiento se apresuran a ayudar a refugiados con llegada de Trump

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DANBURY.- Con la llegada nuevamente del presidente Donald Trump, las agencias de reasentamiento han comenzado a moverse rápidamente para ayudar a los refugiados, sobre cuando el mandatario ha comenzado a firmar ordenes ejecutivas que están impactando en Connecticut.

Trump ha comenzado a cerrar las puertas fronterizas de inmediato, por lo que Maria Mostajo, ex fiscal de Manhattan, y Carolyn Setlow, ejecutiva de negocios jubilada, han estado trabajando frenéticamente para asentar a las familias en Connecticut a través de un proyecto que fundaron en su pequeña ciudad de Washington.

Mostajo declaró que “si Trump llega y pone freno a estas entradas o, como ha hecho en el pasado, puede reducirse el número de personas que pueden entrar por año, eso significa básicamente que cada vez menos de todas esas personas que están en proceso de admisión realmente lo harán”.

El Programa de Admisión de Refugiados de Estados Unidos ha permitido la entrada de más de 3 millones de personas desde que el Congreso lo creó en 1980 para refugiados que temen ser perseguidos por su raza, religión, nacionalidad, pertenencia a un grupo social u opinión política.

Casi 30 mil refugiados llegaron durante los últimos tres meses de 2024, acercándose al límite anual de Joe Biden de 125 mil.

Trump admitió a unos 11 mil durante el último año de su primer mandato, la menor cantidad desde que los Estados Unidos comenzó con los reasentamientos.

Los presidentes anteriores establecieron objetivos en la cifra de refugiados permitodos, sin embargo, el ex presidente Joe Biden los aumentó, al citar “la generosidad que siempre ha estado en el centro del espíritu estadounidense” y los miles de millones de dólares que los refugiados han aportado a la economía estadounidense.

De acuerdo con AP, uno de las refugiados que se han beneficiado del programa es Rogers López, quien se ha instado en su apartamento amueblado de dos habitaciones en un suburbio de Connecticut, justo antes de que el presidente electo Donald Trump asumiera el cargo.

López, su esposa Karina Cañizarez y su hijo Jesús, de 5 años, son refugiados de Venezuela y Colombia que fueron acogidos por un equipo de voluntarios que los apoyaron cuando llegaron en diciembre.

Encuentros similares ocurrieron en todo el país mientras los grupos de reasentamiento luchaban en los últimos días del gobierno del presidente Joe Biden por encontrar hogares para los refugiados antes de que Trump limite drásticamente, si no cierra, este camino hacia la seguridad y la ciudadanía.

López, un inmigrante de 29 años, declaró a AP que “siempre, el proceso de refugiados es muy difícil”, quien agregó que “problemas políticos” lo obligaron a salir de Venezuela.

“Salimos bien de Venezuela, pero será más difícil en el futuro”, comentó.

En solo dos semanas, los voluntarios de New Milford lograron encontrar un apartamento y llenarlo con comida, juguetes y muebles de tiendas de segunda mano. Esperan que la familia López-Cañizarez se integre a la comunidad, encuentre trabajo y esté lista para hacerse cargo de sus gastos de subsistencia en un año.

La pareja no se dio cuenta de que recibirían tanta ayuda y nunca soñaron que podrían vivir en un lugar donde se sentirían tan seguros.

Durante la caída del gobierno apoyado por Estados Unidos en Afganistán, Mostajo y Setlow celebraron una reunión comunitaria, pidiendo voluntarios y fondos para ayudar a asentar a una familia afgana de seis personas.

A través de varias iniciativas de recaudación de fondos, incluida una campaña de GoFundMe y una fiesta donada por una destilería local, recaudaron 80 mil dólares, así como donaciones de muebles y ropa, ayuda legal gratuita, tutoría de inglés y otra asistencia.

Ella y Setlow se dieron cuenta de que su Proyecto de Reubicación en Washington podría generar apoyo para más refugiados proporcionando subvenciones de hasta 10 mil dólares a otros voluntarios. Desde la elección, han otorgado subvenciones al grupo de New Milford y a otros tres, y hay dos más en proceso, dijo Mostajo.

Tras la victoria de Trump, organizaciones benéficas internacionales como Church World Service instaron a los voluntarios de todo Estados Unidos a crear rápidamente más grupos de patrocinio privados como parte de Welcome Corps, una iniciativa del Departamento de Estado de los Estados Unidos lanzada en 2023 para alentar a los equipos de ciudadanos a asumir la responsabilidad de los refugiados que llegan.

Los grupos deben recaudar un mínimo de 2.425 dólares por refugiado para cubrir sus primeros 90 días de gastos de manutención. (Con información de AP).

 

 

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