NEW CANAAN.- La celebración de inauguración de un complejo de alquiler asequible y subsidiado de 100 unidades en New Canaan dio a los funcionarios electos locales una plataforma para criticar las leyes de vivienda asequible de Connecticut que, según afirman, desalientan a muchas comunidades a desarrollar viviendas en un momento en que el Estado necesita decenas de miles de casas y apartamentos nuevos.
Mientras el gobernador Ned Lamont se sentaba a la sombra de una carpa con unas 100 personas que conmemoraban la finalización del complejo Canaan Parish cerca del centro, los líderes electos locales se quejaron de que este proyecto no cuenta para la nueva construcción que permitiría a New Canaan eludir las restricciones bajo una ley estatal conocida como 8-30g.
La ley da a los desarrolladores la oportunidad de llevar a la corte a un pueblo si rechaza sus propuestas para ciertas viviendas asequibles.
A los municipios se les otorga una moratoria y están exentos de la ley si un cierto porcentaje de su stock (conjunto) total de viviendas se designa asequible.
El complejo de la Canaan Parish no califica para una exención porque es una renovación y expansión, no toda una construcción nueva.
Y aunque Sella Mosquera-Bruno, comisionada estatal de vivienda, dijo que no puede comentar porque los problemas están bajo revisión administrativa y están en un tribunal estatal, Lamont elogió las unidades subsidiadas y asequibles en New Canaan que reemplazaron un complejo en ruinas de casi 50 años.
Los funcionarios locales, incluido el primer concejal Kevin Moynihan, Scott Hobbs, presidente de la Autoridad de Vivienda de New Canaan y miembros de la Asamblea General criticaron el panorama político.
Otros suplicaron al gobernador Ned Lamont que hiciera más por las viviendas asequibles.
En el pasado, New Canaan ganó dos moratorias del Estado. Esas moratorias impiden que los desarrolladores puedan eludir las reglas de zonificación de la Ciudad. Durante las últimas dos décadas, la cantidad de unidades asequibles en New Canaan aumentó de 130 unidades asequibles a 200.
Lamont, respondiendo a las preguntas después de que se cortara la cinta roja, dijo que cree que, durante la próxima sesión legislativa, es probable que presione para que las ciudades que se esfuerzan por construir unidades asequibles queden exentas de la responsabilidad de 8-30 g.
