HARTFORD.- Ocho casos de COVID-19, recientemente confirmados en el campus principal de Storrs de la Universidad de Connecticut (UConn), han obligado a decenas de estudiantes a entrar en cuarentena temporal después de haber estado potencialmente expuestos al virus.
Según el panel de COVID-19 de la UConn, se han confirmado tres nuevos casos en empleados o afiliados, mientras que tres estudiantes que viven en el campus de Storrs y dos estudiantes fuera del campus han dado positivo.
En respuesta a la serie de casos positivos, al menos 35 estudiantes han sido puestos en cuarentena, mientras que nueve estudiantes que dieron positivo se han recuperado.
Hay un total de 245 camas de aislamiento en Storrs, y 212 aún están disponibles.
A cualquier persona que crea que pudo haber estado expuesta al COVID-19 también se le ha recomendado que se aísle temporalmente y controle su salud para ver si se desarrolla algún síntoma.
A partir del miércoles 27 de enero, el nivel de alerta de COVID-19 en Storrs se puso rojo, lo que podría conducir a cuarentenas obligatorias, clases en línea, actividades limitadas en el campus y comida para llevar solo en los comedores, entre otras posibles consecuencias.
Los funcionarios señalaron que “todos los estudiantes que viajan diariamente y toman clases en persona deben ser evaluados antes de regresar al campus. Los estudiantes que dan positivo en la prueba no pueden regresar al campus hasta que estén médicamente aprobados”.
